L'esercito segue indagato sul "secondo volo"

A un año de la entrega de los informes de las Fuerzas Armadas sobre el destino de los desaparecidos, el Ejército mantiene abierta la investigación interna sobre el segundo vuelo. Las organizaciones de derechos humanos, en tanto, advierten que los hechos posteriores contradijeron las conclusiones iniciales.

El 8 de agosto de 2005, en un momento calificado como "histórico" por el presidente Tabaré Vázquez, los comandantes en jefe del Ejército, Fuerza Aérea y Armada Nacional entregaron al mandatario los resultados de las investigaciones internas sobre los hechos de la dictadura.

Pasado un año, con el hallazgo de dos cuerpos y la búsqueda infructuosa de los restos de María Claudia García de Gelman mediante, las organizaciones de derechos humanos evalúan como "desparejos" los informes de cada una de las fuerzas.

Mientras que el documento de la Fuerza Aérea es el que despierta más adhesiones, el del Ejército y la Armada son los más criticados a la luz de los acontecimientos que se sucedieron desde ese día a la fecha.

A la vez, existe amplia coincidencia en la necesidad avanzar sobre el segundo vuelo clandestino que trasladó el 5 de octubre de 1976 a presos políticos de Argentina a Uruguay y del cual no hay sobrevivientes.

El coordinador del Servicio de Paz y Justicia (Serpaj), Guillermo Paysée, señaló a Ultimas Noticias que ve con "preocupación" que, frente al reconocimiento oficial del segundo vuelo por parte de la Fuerza Aérea, "no hubo actuación complementaria para saber quiénes vinieron allí y cuál fue su destino".

Fuentes castrenses informaron que el Ejército dejó abierta una "línea de investigación" sobre ese hecho que depende directamente del propio comandante en jefe Carlos Díaz. Si bien aclararon que no se está "a foja cero", reconocieron que se trata de un tema "muy enredado" y "difícil".

Se indicó que no se han fijado plazos para culminar el trabajo porque "más allá de la ansiedad propia de la tarea" este es un asunto "que no se concluye por decisión política", dijeron las fuentes. "La comisión cumplió su función específica pero los canales para recibir información están abiertos", agregaron.

CRÍTICAS AL EJÉRCITO

Las organizaciones de DDHH son severamente críticas con el informe del Ejército. El integrante de Familiares de Detenidos Desaparecidos Javier Miranda señaló que los hechos posteriores "no corroboraron" y "contradijeron" las conclusiones de dicho documento.

A modo de ejemplo, mencionó el caso de su padre, Fernando Miranda, sobre quien se había dicho que había sido inhumado en el Batallón N° 14 y sus restos posteriormente cremados. "Los hechos demuestran que no fue así, que fue enterrado en el 13 y allí quedó", subrayó.

Miranda, al igual que el resto de los consultados, señaló que el caso más evidente de contradicción es el de María Claudia García de Gelman. El mismo 8 de agosto el presidente Vázquez dijo, al recibir el informe del Ejército: "Casi seguramente en más de un 99% nos da seguridad de dónde estarían los restos de la señora María Claudia García de Gelman".

Un año después, los técnicos de la Facultad de Humanidades culminaron sin hallazgos la búsqueda en los lugares señalados del batallón N° 14.

El abogado de la familia Gelman, José Luis González, considera que eso demuestra que los "informantes del comandante en jefe del Ejército mintieron". En coincidencia, Paysée sostuvo que el Ejército "desinformó al presidente Vázquez y a la sociedad toda".

El balance del Ejército, en cambio, es que "se ha avanzado y mucho porque se encontraron cuerpos y hay gente detenida esperando extradición".

No obstante, reconoce que "faltan (que aparezcan) los huesos", tema que considera "el más difícil". Para el Ejército el resultado hasta el momento es concreto. "Hallamos dos cuerpos, uno es Miranda y el otro (en referencia al fragmento óseo encontrado en el 13) no se pudo identificar; y comprobamos la existencia de la Operación Zanahoria en el Batallón Nº 13. En el 14 el trabajo no está concluido pese a que ahora no se está excavando", afirmaron las fuentes.

EXPECTATIVA EN LA JUSTICIA Y RECLAMO DE DATOS

Las organizaciones de Derechos Humanos reconocen que se ha avanzado en la materia, pero reclaman saber más. A estos efectos, centran sus expectativas en lo que pueda hacer la justicia en los casos en su poder.

"Al no aparecer resultados, empiezan a moverse las acciones judiciales. Ese es un camino para saber la verdad", sostuvo Miranda. Sin embargo, para él todavía "hay otros caminos" vinculados al testimonio que puedan prestar quienes participaron directa o indirectamente de los hechos. Además del Ejército, Miranda considera que la Armada también debe profundizar su informe porque "intenta deslindar toda responsabilidad y no es convincente al haber suficiente información que afirma lo contrario".

En su opinión, "se debe seguir investigando y el gobierno no puede conformarse con la información dada hasta ahora, pero el mecanismo de búsqueda de información por vías oficiales-extraoficiales, con personas del gobierno que buscan la información en una especie de colaboración voluntaria de los implicados, no ha dado los resultados esperados".

Paysée, por su parte, espera ver los avances que se puedan realizarse en el terreno judicial, al tiempo que es partidario de la creación de una comisión de la verdad para abrir "la cancha de una vez por todas".

Dicha comisión estaría integrada por representantes del gobierno, organizaciones de la sociedad civil y Fuerzas Armadas.