Uruguay: Informe confirma existencia de cementerio clandestino en Batallón 13

7.febrero/2004 - Uruguay - Adital/Argenpress - Con técnicas de relevamiento, que por primera vez se utilizan en Uruguay, un grupo de técnicos recomendó a la Justicia Penal realizar una inspección arqueológica dentro de la unidad militar del Batallón de Infantería 13. Ellos identificaron en el sitio, donde estaba una cabaña, tres tumbas en una zona arbolada y una fosa común en un pantano junto al arroyo Miguelete.

El informe final del grupo de técnicos de la Facultad de Ciencias sobre la eventual existencia de un cementerio clandestino en el Batallón de Infantería Nº 13, que fue entregado el lunes, día 2, a la Justicia Penal, confirma la necesidad de realizar el relevamiento dentro de la unidad militar.

El trabajo, realizado a partir de una amplia información aerofotogramétrica y de una serie de testimonios públicos sobre la existencia de un cementerio clandestino, señalaría cuatro localizaciones sobre las que recomienda un estudio de campo ante la posible existencia de restos mortales de desaparecidos. La justificativa es que en el Batallón, durante los años de la dictadura, funcionó un centro de torturas conocido como "300 Carlos", donde se produjo al menos la desaparición de Eduardo Bleier, Juan Manuel Brieba, Fernando Miranda, Carlos Arévalo, Julio Correa, Otermin Montesdeoca y Julio Lorenzo Escudero.

A fines de 1976, según el testimonio del ex soldado Ariel López Silva - confirmado luego por otras fuentes – se produjeron varios enterramientos, entre ellos el de una mujer que podría ser la maestra Elena Quinteros o María Claudia García Irureta Goyena, la nuera del poeta argentino Juan Gelman.

El equipo multidisciplinario fue integrado por el profesor titular de Geomorfología, ingeniero agrónomo Daniel Panario y la asistente Ofelia Gutiérrez, de la Facultad de Ciencias; el antropólogo forense Horacio E. Solla, del Instituto Técnico Forense del Poder Judicial; y la asistente del Departamento de Arqueología de la Facultad de Humanidades, Elizabeth Onega.

El informe comparó tomas aerofotográficas entre 1945 y 1996, que permitieron analizar todo movimiento de tierras desde las primeras construcciones realizadas en el Batallón 13 hasta la fecha actual y observar las diferencias del césped y la plantación de árboles durante esos 54 años.

En particular, se observaron los registros aerofotogramétricos posteriores a 1975 que permitieron ahora ampliar y confirmar un informe preliminar en el que ya habían concluido en marcar como posibles sitios de enterramiento los lugares que un testigo señaló en un plano aéreo.

Los puntos en los que los científicos recomiendan un trabajo arqueológico incluyen el entorno de una cabaña que se visualiza en las tomas aéreas entre 1966 y 1969 y fue removida entre 1981 y 1985. Un segundo sitio de interés arqueológico estaría ubicado detrás de uno de los arcos de una cancha de fútbol existente en la unidad militar.

Los lugares citados son los espacios donde los testigos aseguran que fueron enterrados - y eventualmente exhumados y trasladados a otro sitio en una maniobra conocida como "Operación Zanahoria" - varios ciudadanos que permanecen en calidad de desaparecidos desde 1976.

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