L'aborto clandestino causa 5.000 morti ogni anno in america Latina e nei caraibi

Aborto causa cinco mil muertes por año en América Latina y Caribe

Hoy, en el Día por la Despenalización del Aborto, una campaña se pone en marcha en el intento de reducir un índice asustador: en América Latina y Caribe, 5.000 mujeres mueren anualmente debido a complicaciones relacionadas con abortos inseguros. Coordinada por el Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, la campaña cuenta con la participación de organizaciones de 21 países de estas dos regiones.

Bajo los lemas "Las Mujeres Deciden, la Sociedad respeta y el Estado garantiza" y "Métodos Anticonceptivos para no abortar. Aborto legal para no morir", la campaña quiere sensibilizar a los ciudadanos y ciudadanas del mundo ante el problema que sigue ocasionando muchas divisiones.

Mientras sigue caracterizado con un tema polémico, los datos divulgados por la Organización Panamericana de Salud piden una solución concreta sobre el asunto, ya que el aborto es la principal causa de muerte materna en países como Argentina, Chile, Guatemala, Panamá y Paraguay.

Las argumentaciones de las entidades favorables a la practica legal del aborto, continúan las mismas: ejecutado de forma clandestina o insegura, los abortos no se dan en condiciones que puedan garantizar una intervención óptima; se recurre a personal no especializado; se pone en riesgo la vida de la mujer; además, atenta contra el libre ejercicio de la profesión médica.

En Brasil, las estadísticas señalan que 800 mil abortos se realizan, a cada año, como forma de interrumpir los embarazos no deseados. A causa de las situaciones en que son realizados, 250 mil mujeres son internadas en los hospitales de la rede pública de salud.

Según registros del Ministerio de Salud de Paraguay, sólo en el 2003 murieron 37 mujeres debido al aborto, lo que representa un promedio de una muerte a cada diez días. Pero la cantidad sería mayor, ya que ni todos los casos son registrados por los órganos de salud del Estado.

En Nicaragua, las mujeres siguen en la lucha para cambiar la Ley del Aborto. Por la ley actual, los abortos solamente son permitidos en casos de violación. Por otros motivos, las mujeres pueden ser condenadas a seis años de prisión. Sin embargo, al inicio del año pasado, el caso de una niña de nueve años, que había sido violentada, y sometida a un aborto fue un tema de discusión. La Conferencia Episcopal de Nicaragua consideró que el debate suscitado en torno del asunto ha sido forzado para tratar de introducir el aborto en el país.

Entidades feministas acusan a la Iglesia por la influencia negativa sobre el tema. "La prohibición del aborto es parte de las prácticas que tratan de controlar la sexualidad de las personas. Quienes penalizan el aborto consideran que el ejercicio de la sexualidad es sólo para la reproducción, además consideran que la reproducción no es un acto humano sino es la consecuencia de un mandato divino en el cual las personas humanas no pueden intervenir", señalan.

La Iglesia

La Iglesia es el principal obstáculo para la aprobación de leyes o otras medidas que legalicen al aborto. El derecho constitucional a la vida en cualquiera que sean las condiciones es el argumento central de la institución religiosa.

Mientras varias movilizaciones ocurren en distintos puntos del mundo debido al Día de la Despenalización del Aborto, la Conferencia Episcopal de México, país con alto índice de violaciones sexuales contra mujeres, emitió, una vez más, su rechazo a la despenalización, uno de los contenidos del proyecto de Código Penal, aprobado el 22 pasado por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).

En comunicado de prensa, según publicado en El Universal, periódico de México, los obispos advirtieron que "interrumpir voluntariamente la gestión de una vida humana a través del aborto provocado, en cualquiera de sus formas, equivale a negar a una persona o ciudadano su primer derecho humano: el derecho a existir, a vivir".